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jueves, 25 de agosto de 2011

Te ví, eras esa estrella que sobresalia de las demás...
La que más brillaba, la más hermosa de todas.
No podia sacarte los ojos de encima, mientras más te veia, más te acercabas a mi.
No podia dejar de pensar en vos, en que te queria ver el resto de mi vida frente a mi, queria que me iluminaras en mis noches mas oscuras eternamente.
Podía ser posible tanta belleza en un mismo cielo? o eran sólo mis ojos los que te veian tan perfecta, tan dulce y celestial? No necesitaba la respuesta, ya la sabia.
Queria mirarte a los ojos, decirtelo. Esperaba que en ese mismo instante aparecieras frente a mi, con ese centelleo que me erizaba la piel, ese centelleo de siempre, que me hacia amarte de la manera más inexplicable.
La tristeza se fué, no habia preocupaciones porque sabia que serias siempre mia, lo sentia en lo más profundo de mi ser.
Te veia por doquier, en el reflejo del mar, en el propio reflejo de mis ojos en el espejo.
Por un momento sentí que no cabia mas felicidad dentro mio, y en ese mismo instante te prometí, que no importaba donde estés,  donde quiera que yo te encontrara te iba a mirar -